Lufthansa inauguró una nueva sede de aerolínea en Brasil. El reto era pensar en una oficina polivalente, con una división entre espacios cerrados y abiertos y que, principalmente, solucionara el tema del aprovechamiento del espacio. Para ello eligió a Marelli como proveedor de mobiliario.Para el éxito del proyecto, el equipo de AFGR Arquitettos pensó en cinco pilares: sectorización, uso de espacios abiertos, espacios flexibles, uso de volúmenes y uso de materiales con lenguaje industrial.

Sectorizar los espacios fue fundamental, ya que ayudó a definir dónde utilizarían el concepto de espacio abierto y dónde estarían los espacios más cerrados. El proyecto unificó toda la losa, dividiendo la oficina en recepción y hall de ascensores. Además, en el margen izquierdo del plan se definieron las áreas financiera, administrativa y de recursos humanos. En este caso no trabajamos con el concepto abierto, ya que no era el perfil de los empleados. Se reservó un espacio abierto para el equipo de Marketing, repartido entre las habitaciones de los dos directivos.

Finalmente, aprovechamos toda la volumetría del entorno, creando el concepto desde un lenguaje industrial, con instalaciones a la vista, zonas sin revestimiento, uso de chapas, hormigón y materias primas.